Fotografía tomada por Marcelo Ranea, publicada por el diario Clarín el 6 de octubre de 1982.

La pregunta de por qué esta imagen me parece superlativa podría ser abordada desde muchas perspectivas, pero creo que justificando mi elección también respondo a por qué me gusta la fotografía como expresión artística.

En primer lugar, esta imagen no debería analizarse sin otra imagen, que la sucede y que fue censurada casi 40 años, cuyo autor fue secuestrado y torturado días después de haberla tomada y cuyo link dejaré más abajo.

Esta imagen fue tomada en una manifestación donde mujeres pedían por el paradero de sus hijes desaparecides durante la dictadura militar más oscura de la historia argentina. Cabe destacar que 1982 fue un año acalorado para quienes ocupaban los altos mandos en esa época y toda oportunidad de limpiar su imagen fue tomada. 

Clarín  publica esta imagen el 6 de octubre de 1982 con el título ''Pacífica Manifestación en Plaza de Mayo'' y debajo esta imagen que casi ocupaba toda el cuerpo de la portada.

Lo interesante de esta imagen, en lo particular, es la mirada solemne de Gallone (el oficial de la imagen) y el punto de vista levemente contrapicado desde donde fue tomada. Con estos dos puntos en foco, la imagen analizada desde un punto de vista inocente, es perfecta. Composicionalmente parecería ser el retrato de compasión y hermandad entre el pueblo y el Estado. Una especie de reconciliación.

Más la realidad estaba muy alejada de este análisis.

En el retrato vemos a nuestras queridas Madres cuyos rostros suscitan la indignación y desesperación que no podían adornarse con una mirada tiernizada del Oficial, ni mucho menos por la propagación de esta imagen desde los medios hegemónicos de comunicación.

Y acá es donde hablo subjetivamente, lo importante de la imagen fotográfica es la comunicación. Lo interesante de la fotografía es la manipulación en la espontaneidad. Me interesa la fotografía porque no es simplemente detener el tiempo en un click, sino es hacer eterna una única forma de mirar. El poder de la fotografía radica en cómo una imagen puede cambiar todo un relato sin hacer uso de palabras. Esta imagen es un claro ejemplo. Cualquier persona que no conozca nuestra historia, que no esté familiarizada con la historia de las Madres, al ver esta imagen podría sentir simpatía por el Oficial, podría sentirse un par, podría llegar a ser un ciudadano amistándose con el pueblo. Podría ser inocente. 

En la fotografía, la persona más oscura y violenta, puede ser mostrada inocente y pulcro, el cobarde puede ser valiente, el honesto puede ser el mentiroso más descarado. Pero la elección dependerá siempre del relato que quiera contar quien toma la foto.

Creo que la imagen en blanco y negro siempre es nostálgica y en particular en este contexto, el color sobraría. Un pañuelo blanco siempre es una figura que impone silencio y admiración.  Pero en esta foto, el blanco es abrazado por la oscuridad, es relegado a la imagen central que es la figura del Oficial que abraza a la mujer del pañuelo blanco.

Link a la imagen que discute a esta principal: https://3.bp.blogspot.com/-HNGtN2dXWm0/X3unekB24-I/AAAAAAABpeY/fpvSP131g54lVc5BjbjlSBe442RhzXprwCLcBGAsYHQ/s640/Jorge%2BSanchez.jpg






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